Hoy en día quien más y quien menos, se ha planteado alguna vez acudir a una terapia.
Sobre todo en las últimas generaciones donde por una parte somos más conscientes de nosotros mismos, quizás porque no hay otras necesidades básicas que nos apremian (recordemos la famosa pirámide de Mashlow) o quizás porque en la espiral imparable del avance tecnológico, hemos perdido lo más importante… la capacidad de ser felices.
Lo importante es que en los últimos años una nueva era de auto descubrimiento ha surgido para guiarnos en el camino, en ese camino que todos tendríamos que recorrer.
Y es que la única base posible para el cambio es el conocimiento, el auto-conocimiento, tenemos que saber quién somos, donde estamos, para poder plantearnos a donde queremos llegar.
Recordemos que nuestro entorno es cambiante a la par que incontrolable, pero nosotros tenemos el poder de cambiar aquí y ahora.
0 comentarios